Cuaderno de pantalla que empezó a finales de marzo del año 2010, para hablar de poesía, y que luego se fue extendiendo a todo tipo de actividades y situaciones o bien conectadas (manuscritos, investigación, métrica, bibliotecas, archivos, autores...) o bien más alejadas (árboles, viajes, gentes...) Y finalmente, a todo, que para eso se crearon estos cuadernos.

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domingo, 1 de mayo de 2011

La paulonia imperial en el Retiro


Ahora es el mejor momento para descubrir árboles y especies en el Retiro –y en cualquier lugar donde haya un jardín–, porque desde comienzos de abril se ha iniciado el desarrollo y floración, de manera que aquel esqueleto de árbol en el que apenas nos fijábamos se ha vestido de rosa, o los frutales silvestres –desmedrados en inviernos– se nievan; o los arbustos, de repente, se convierten en montecitos de flores.... En algunos casos, la floración es breve, y el árbol y, sobre todo, el arbusto, vuelve a una anonimato verde y más o menos denso.

spiraea
Traigo un ejemplo precioso, creo, que es la paulonia imperial –vigilada la tengo desde hace semanas–, que ha florecido espectacularmente, al menos los dos ejemplares de la zona que hay entre la entrada de la Calle Sáinz de Baranda y la entrada de la calle Doce de Octubre, ya que los cuatro que andan cerca y que tiene cartela explicatoria o no han llegado a florecer o lo han hecho sin que se note; se trata de un rectángulo -se acompaña  el mapa que me va a servir de guía, sobre todo cuando aprenda a manejar el "photo-shop"–, un rectángulo, decía, en el que se han acumulado las nuevas plantaciones de árboles (ginkos, liquidámbares, paulonias, magnolios de primavera, acebos, moreras pendulares, cerezos de flor, etc.) rodeando a árboles viejos (algunos álamos, pinos, abetos, olivos....) Ya lo explicaremos cuando hablemos de la historia de esta zona del Retiro, que en cierto modo lo explica.Va la paulonia imperial –porque solo la emperatriz, en China, de donde procede (se trajo en el siglo XIX), podía utilizar ese árbol para su mausoleo–, que es bastante frecuente en ciudades mediterráneas, por ejemplo en Barcelona, para trazar preciosas avenidas. La flor es muy parecida a la de la jacarandá, pero la hoja, grandota y frágil, diferencia ambas especies, desde luego, además del porte, mucho más irregular el de la paulonia, y otros detalles. 
A media floración, la paulonia va alfombrando el suelo de sus trompetas florales malvas, que desprenden una suave fragancia. Se recogen –como en la foto– y pueden servir para dar la bienvenida al visitante o para presentarlas en ofrenda de amistad y afecto a los vecinos. Esas cosas se hacen.    













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